Tanto la obesidad como la pérdida de peso en ancianos involuntaria son negativas para la salud del mayor. Las causas y formas de luchar contra la obesidad son más conocidas. Pero no lo son tanto los motivos del bajo peso en ancianos y los modos de combatir este problema. En este post vamos a conocer los principales motivos de la bajada involuntaria de peso en ancianos.
Principales causas de la pérdida de peso en ancianos
Pérdida de peso en ancianos por malos hábitos de alimentación
Una de las principales razones por las que las personas mayores sufren pérdida de peso involuntaria es porque tienen malos hábitos alimenticios. En algunos casos es la consecuencia de una vida joven y adulta en la que la alimentación no se ha relacionado con la nutrición. Y se ha caído en vicios o hábitos insanos que se acentúan al llegar a la vejez.
En otros casos estos malos hábitos se adquieren al llegar a la ancianidad y pueden deber a muchos motivos. En ocasiones, la razón es que encuentran la satisfacción que ya no hayan en otros aspectos de su vida. O, el consuelo a la soledad en alimentos insanos. Y dejan de lado aquellos más saludables. Así abusan de los dulces o el chocolate, por ejemplo, y no toman alimentos nutritivos.
En otros, por el contrario, su situación anímica provoca que pierdan el interés por la comida. Y así logran que su dieta se empobrezca y reduzca. De modo, que la pérdida de peso lleve aparejada una desnutrición que puede llegar a ser grave si no se toman medidas relevantes para atajarla con rapidez.
Otros motivos por malos hábitos alimentarios
Pero la pérdida de peso en ancianos por malos hábitos alimentarios tiene otro motivo frecuente. Este es la pérdida de capacidades. El cansancio, las molestias físicas, los dolores o el miedo a olvidarse el fuego encendido son algunos de los diversos motivos por los que los mayores dejan de prepararse su propia comida. Si viven solos y dejan de preparar sus propios alimentos, acaban comiendo cualquier cosa a su alcance. Y esta comida raramente es saludable. No es ni nutritiva ni permite mantener una dieta equilibrada.
Pérdida de peso en ancianos por malnutrición
Son varias las causas fisiológicas. Y que provocan que las personas mayores tengan una mala alimentación pobre en nutrientes. Además de las causas de pérdida de peso en ancianos por inapetencia. O por causas emocionales o físicas hay otras que se dan con relativa frecuencia.
Entre ellas, destaca la disfagia o dificultad para tragar o deglutir los alimentos. Este es un problema que no solo provoca pérdida de peso en ancianos. Además, puede provocar una desnutrición grave o incluso un problema de deshidratación fatal. En estos casos es necesario acudir al médico para que este indique las medidas a tomar para proporcionar al anciano la dieta que necesita.
Algunas dolencias hacen que las personas mayores pierdan el apetito. Otras como las pesadez durante la digestión o los ardores de estómago hace que coman menos. O que modifiquen su dieta recurriendo a alternativas menos nutritivas. En ambos casos la pérdida de peso en ancianos que conlleva va unida a una falta de nutrientes necesarios para el organismo.